Nayarit cada mes debe pagar 130 millones de pesos por concepto de deuda.
Esta enorme carga resta capacidad de acción para las cosas que de verdad importan: salud, educación, seguridad o transporte.
Los gobiernos anteriores y su inercia de corrupción despedazaron las finanzas estatales. Y no son percepciones; al tercer semestre de 2022, el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados, reportó que la deuda pública de Nayarit significa el 26% de sus ingresos, donde cada nayarita tendría una deuda de 5 mil pesos, ambos indicadores por encima del promedio nacional.
Es urgente terminar con la obligación de la deuda. Finanzas sanas significan un mayor margen para emprender obras y acciones que impacten la vida pública de Nayarit.